jueves, 19 de mayo de 2016

CSI para tu clase, mejor que la serie de TV

Este trimestre tuve la suerte de poder asistir a una interesante formación a cargo de la Fundación Trilema.  Y digo interesante porque impartieron sesiones sobre Aprendizaje Cooperativo, Aprender a Aprender y Rutinas de Pensamiento y Evaluación del Aprendizaje.
Algunas estrategias de Evaluación
Quedé encantada y me moría de ganas de aplicarlo ya que, además, son conocimientos que se oxidan rápido si no se desarrollan. Desde entonces he indagado en ellos de manera autodidacta y, por supuesto, los he trasladado a mis pequeñuelos de 2º de Primaria, a los cuales me encanta regalar lo mejor de lo mejor en Educación.

Ya hemos empezado a trabajar con rutinas de pensamiento como VEO-PIENSO-ME PREGUNTO o, en las imágenes, CSI (color, símbolo e imagen).


No se están copiando. Comparan su trabajo con otro parecido.
En este caso estudiábamos los peces como parte del contenido "vertebrados e invertebrados". Los alumnos debían asociar un color, un símbolo sencillo y una imagen más desarrollada al concepto de "pez".  Cualquier cosa podría servir: desde una concha azul hasta una trompeta naranja. Lo interesante viene a la hora de explicar las relaciones entre ambos, ya que ahí es cuando realmente hacen un exhaustivo trabajo de metacognición.
Plantilla de la rutina CSI de la Fundación Trilema

Os recomiendo muy MUCHO que lo apliquéis en vuestras aulas y disfrutéis con sus geniales razonamientos y sus cabecitas echando humo.

martes, 17 de mayo de 2016

Yoga de fuera de este mundo...

... porque a veces se me va la cosa de las manos.

Hoy hemos aprendido la respiración Ujjayi con Darth Vader, hemos hecho el entrenamiento de los soldados imperiales... y hemos sentido "La Fuerza"



Todos los martes a las 18:45 en La Casa del Bosque, San Juan de Alicante

domingo, 1 de mayo de 2016

Cocinillas

La excusa en esta ocasión era hacer unas magdalenas para mamá, pero debemos aprovecharla a menudo en el aula.

La cocina es todo un arte pero además para nuestros alumnos suele ser muy atractiva. Les encanta meter las manos en masas y moldes, decorar utilizando diferentes colores y mirar a través del horno. Algunos listillos también hacen "controles de calidad" antes de terminar las recetas ;)


A través de la elaboración de platos muy sencillos podemos trabajar varias competencias en el aula en tan sólo unas pocas horas: haciendo las correspondientes adaptaciones potenciaremos la comprensión lectora, trabajando gramática, ortografía, vocabulario... yo siempre presento las recetas en inglés o valenciano para aprovechar esta genial inmersión lingüística. Si son ellos mismos las que las buscan y escriben podemos trabajar las TIC, la escritura... asimismo, son un estupendo recurso para trabajar múltiples contenidos matemáticos; desde las fracciones (introduzca 1/4 de la harina en un bol, corte la tarta en 12 porciones...), hasta las conversiones de medidas de volumen, peso...(dales la receta en kilos y una jarra medidora en gramos...¿puede haber algo más vivencial?). En mi caso, el curso pasado aprendimos a leer bien la hora cuando cocinamos pizzas-reloj y nos fuimos comiendo cuarto a cuarto... It's a quarter past five! It's half past ten!


Otra competencia importante es la que adquieren al aprender recetas de distintas partes del mundo. Plantéales preguntas-problema como...¿por qué en China muchos platos conllevan arroz?, ¿cuál es la comida típica de Francia?....

Además la elaboración de masas es muy buena para reforzar las habilidades motrices básicas (no en vano en las escuelas Waldorf los más pequeños hacen pan a menudo).

Os animo a todos los maestros (y mamás y papás), a que hagáis partícipes a los niños en la cocina. Os lo van a agradecer, serán más competentes cuando tengan que cocinar para sí mismos...¡y harán cosas para chuparse los dedos!

Y si te lo dedican con cariño...¡pues ya para qué contar!

sábado, 27 de febrero de 2016

Educación Emocional con "El Monstruo de los Colores"

El monstre de colors en la edición original en catalán

Seguro que si trabajas con niños has oído hablar ya del cuento de "El Monstruo de los Colores", y si no es así, te propongo que vayas a una buena librería a verlo en cuanto puedas. Te ofrezco un adelanto aquí, en la página personal de su fantástica autora Anna Llenas, a la cual considero una artista por su forma de ilustrar y definir las emociones humanas (cosa que ya hacía mucho antes de "Inside Out").
Para nosotros los maestros, éste libro es una joya, ya que este monstruo tan simpático permite ayudar a los niños a diferenciar  las emociones. Al principio se encuentra confuso y hecho un lío, por lo que su amiga le da una sencilla explicación de cada emoción: alegría, ira, calma, tristeza, miedo... Para ello, la autora utiliza unas bellas ilustraciones y un lenguaje directo y evocador. 

Así, os invito a trabajar la Educación Emocional a través de este amiguito tan simpático. En mi caso, lo que hice fue leer el cuento con mi clase, 2º de Primaria, y comentar libremente la lectura. Después, les pregunté si conocían esas emociones, en qué ocasiones se habían sentido así, cómo se sentían si hablaban de ello, si había formas de sentirse mejor en el caso de la ira, la tristeza o el miedo... Observamos el lenguaje corporal del monstruo, las expresiones faciales...

En otro momento, pasados unos días, me presenté en clase con unos botes un tanto especiales, un monstruoso dibujo de cada emoción y un "emociómetro". 



Lo primero que hicimos fue asociar cada dibujo con su bote (curiosamente, el miedo y la confusión generaron más confusión, fueron las emociones que intercambiaron, lo que me permitió explicarles que generalmente el miedo nos lo producen las cosas desconocidas). A continuación, nos fuimos al aula multiusos para andar anchos, y distribuimos cada bote y dibujo por el espacio. Durante ese rato, los niños circularon libremente, pasando por cada emoción y colaborando en colorear al monstruo y escribir en cada bote situaciones que les hicieran sentirse así. 


Se lo tomaron realmente en serio y después quisieron que los monstruos nos acompañaran durante el resto del curso, así que tienen un sitio privilegiado en el aula desde entonces, así como el emociómetro, en el que cada uno tiene una pinza y la va situando según la "temperatura emocional" del día.


Hay mil propuestas para trabajar este cuento en clase. Os animo a hacerlo a todos, porque es muy claro e ilustrativo. Para trabajarlo a través del yoga os sugiero que echéis un ojo a la web de Yaiyoga, una profe de yoga de Vigo que utilizando unas telas, mandalas e hilos, crea una sesión súper bonita a través del libro. 

Espero que os haya gustado la entrada y la encontréis de utilidad. 

Y colorín colorado...¡el monstruo de los colores ha terminado!








sábado, 13 de febrero de 2016

Los superhéroes y el yoga

Hacía ya tiempo que veía una correlación fantástica entre la búsqueda del talento en la escuela y los superhéroes y superheroínas que son (SIEMPRE), nuestros educandos.

Se podía trabajar en el aula de una manera muy interesante a través de la asignatura de valores: creo que es importante hacer ver a los niños que todos tenemos tanto debilidades como superpoderes, o talentos...cosas que se nos dan bien y nos "salen de dentro". Va un poco en la línea de la Teoría de las Inteligencias Múltiples de Howard Gardner. ver aquí

Así, y aprovechando que el Carnaval andaba cerca... (¡toma!), sugerí en el claustro de mi colegio que montásemos un "Casting de Superhéroes" para celebrar el Carnaval. Fue toda una experiencia porque los niños debían crear un superhéroe de su invención, según las necesidades contemporáneas. Vimos algunos tan maravillosos como las chicas del reciclaje, Súper Colores, Súper Tolerancia, Súper Tacones...¡hasta estuvo por allí Súper Félix Rodríguez de la Fuente!

Lo pasamos bomba, pero lo que yo venía a contar era cómo trabajé en clase estos valores. En este caso utilicé el Yoga Infantil, del que soy profesora hace 3 años y que cada vez que puedo integro en el aula. 

Después de haber hablado de lo que se nos daba bien hacer a cada uno, nos dispusimos a empezar una sesión de yoga con movimientos articulares para calentar nuestro cuerpo y lubricar bien todas las articulaciones. También empezamos a conectar con nuestra respiración

Después de practicar el Saludo al Sol, vinyasa que ya conocen muy bien, les hablé de la importancia que tiene enraizarnos bien a la Tierra con nuestros pies, y es que en yoga no se puede empezar la casa por el tejado, y el ásana se construye por los cimientos. Calcamos para ello las plantas de nuestros pies y dibujamos las cuatro esquinas mágicas en las que éstos se apoyarán. 
Pudimos comprobar que si ejercíamos la presión adecuada con nuestros pies sobre la esterilla, ganábamos mucha firmeza, porque además nuestra columna vertebral se encontraba bien erguida. Así, posturas de equilibrio que los niños ya conocían, como Tadasana (la palmera o montaña), o Vrkasana (el árbol), resultaban mucho más fáciles.

El otro superpoder que descubrimos era un poder inherente a todos los seres humanos, pero bastante olvidado: la respiración. Si inhalamos y espiramos correctamente, a través de la nariz, ya estamos mejorando nuestra forma de respirar, pero cuando queremos calmarnos, debemos conectar con nuestra respiración abdominal. Los niños ya conocen el diafragma porque el curso pasado estudiamos el cuerpo humano ver aquí, y saben que cuando implicamos al músculo diafragma en la respiración, nuestro vientre se hinfla un poco, pero los niños necesitan aprender haciendo, y una buen ejercicio es ponerles un pequeño muñeco o peluche sobre la barriguita mientras están en Savasana (postura del muerto, o decúbito supino), de manera que su "amiguito" asciende y pueden verlo durante la fase de inhalación, y desaparece al soltar el aire.

Después de ello, como salvar el mundo siempre es más fácil entre dos, tuvieron tiempo para inventar sus propias poses en pareja. Ahí hubo de todo, pero la del velero les encanta.

 Acabamos la sesión con un ratito de relajación y una gran sonrisa de satisfacción en nuestras caras. Creo que la más grande de todas era la mía... Sin duda me fui de allí aquel día viendo reforzada en mi conciencia una idea muy importante:





 ... I teach. What's your superpower?